Vendajes

Los vendajes son una de las piedras angulares de cualquier botiquín de primeros auxilios, su uso es muy variado y ampliado, no puede faltar en ningún hogar ya que se utiliza para el tratamiento de múltiples lesiones, en este articulo vamos a hablar de una forma detalla de los vendajes, diremos cuándo aplicar uno, cuándo cambiarlo, quitarlo, su importancia y más. Creemos que los primeros auxilios debe ser enseñado a todas las personas para que estén preparadas sin importar la ocasión, esto debe ser algo tan importante como aprender matemáticas o cualquier otra cosa, algo tan común como un vendaje debe ser de conocimiento general, esa es la finalidad de este articulo, hacer llegar a más personas el conocimiento sobre un material que puede en algún momento, llegar a evitarnos molestos trastornos que podamos sufrir.

¿Qué es un vendaje?

Un vendaje es una técnica que consiste en la unión de paños de lana colocados en un orden racional. De forma más precisa, se trata de envolver una parte del cuerpo que esté lesionada por algún motivo. El vendaje se utiliza para sostener un apósito, una férula o algún elemento que cuenta con un uso terapéutico. En algún momento de nuestras vidas podemos haber escuchado algo como: “El doctor me hizo un vendaje en la muñeca para no estar moviéndola, “el especialista me hizo un vendaje en el pie antes del partido”, “mi profesor me hizo un vendaje para no lesionarme”.

Los vendajes tienen especial uso para la inmovilización de una lesión que se hay producido en una articulación o incluso en el hueso de una persona. Un caso claro en donde se hace uso de un vendaje es cuando una persona sufre un esguince por una torcedura, por ejemplo, imagina que vas caminado por la calle y te topas con un desnivel, por estar distraído caes en él y accidentalmente doblas tu tobillo, al acudir a un médico, el mismo te hace un vendaje para limitar los movimientos de la zona.



Los vendajes también se pueden utilizar para cubrir una lesión sobre la piel o para contener una hemorragia. Por ejemplo, ahora imagina un accidente automovilístico, un hombre iba manejando viendo su teléfono y no se fijó que la luz del semáforo había cambiado a rojo, por medio de este descuido, el hombre sigue conduciendo y es atropellado por otro vehículo, al llegar la ambulancia, el enfermero observa que el hombre está sangrando y le aplica un vendaje para contener la hemorragia.
En general, un vendaje es usado en el tratamiento de heridas, hemorragias, contusiones, esguinces, luxaciones y fracturas. El paciente al cual se le es aplicado un vendaje debe seguir una serie de recomendaciones para ser tratado.

Recomendaciones para un vendaje

• El paciente debe estar atento de que el vendaje no cause adormecimiento en la zona.
• Si siente muchas molestias o presión en la zona donde fue aplicada el vendaje, acudir a un especialista para que pueda revisarle de la mejor manera.
• Evitar hacer movimientos bruscos en la parte donde fue aplicado el vendaje.

Además de esto, también se debe estar al tanto que el vendaje puede estar mal colocado por diversas razones:

Precauciones al colocar un vendaje

• Asegurar de colocar bien la zona donde se va a aplicar el vendaje, a veces ocurre que el paciente esta en una posición inadecuada y da como resultados molestias e incluso tensión muscular.
• Evitar el síndrome de la comprensión. Esto ocurre cuando el vendaje se presiona de manera excesiva, lo que causa que los dedos del pie o de la mano empiecen a tener una imagen cianótica (piel morada). También se vuelven fríos y la persona siente que tiene adormecida la zona por completo.

Propósitos de los vendajes

• Compresión: para detener hemorragias, fomentar la absorción de líquidos tisulares y prevenir la pérdida de estos mismos.
• Contención: para limitar los movimientos de extremidades o articulaciones en casos de luxación, esguince o fractura, sujetar material de curación y proporcionar calor y protección.
• Corrección: Para inmovilizar una parte del cuerpo y corregir deformidades.

Tipos de vendas

El material con el cual se fabrican las vendas varían de tamaño y de calidad, es cierto que podemos improvisar una venda a partir de sábanas u otros retales de distintos tejidos, pero sin duda alguna, lo más recomendado es usar un vendaje fabricado específicamente para usos sanitarios. Los tamaños más usados para las vendas son de 5 cm, 7 cm, 10cm y 15 cm de ancho.

Distintos tipos de vendas

• Venda de gasa orillada: su uso es el más común. Se fabrica con algodón, su calidad y características vienen determinadas por la cantidad de hilos por centímetro cuadrado. Son delgadas, ligeras, blandas, y porosas. Son muy utilizadas para fijar apósitos.
• Gasa de Kling: este es un tipo especial, tejida de tal modo que tiende a retraerse.
• Venda de muselina: al igual que la Venda de gasa orillada, se fabrica con algodón pero de consistencia y grosor mayor. Es poco elástica pero resistente se utiliza para inmovilizar y sujetar férulas.
• Venda elástica: como su nombre lo dice, son muy elactica y es lo que principalmente la distingue de otras vendas. Se fabrica entretejiendo algodón y fibras sintéticas elásticas. Son las indicadas cuando el vendaje se aplica en las extremidades para facilitar el retorno venoso.
• Venda elástica adhesiva: posee una cara con pegamento para facilitar su fijación. Por problemas alérgicos o ser una persona de piel delicada, no se debe aplicar directamente a la piel. A su vez, de debe colocar debajo otro vendaje de gasa o bien de celulosa.
• Vendas impregnadas en materiales: materiales que después de su humidificación se solidifican y permiten un vendaje rígido, como el enyesado.

¿Qué es un vendaje oclusivo?

Un vendaje oclusivo es un apósito médico que se utiliza para sellar una herida y no permitir que esta llegue a estar en contacto con el aire, así como también crear un aislamiento en contra de virus, bacterias y otros organismos. En pocas palabras, un vendaje oclusivo es el que no permite que circule el aire en la zona donde es aplicado. Se sabe que ningún apósito en el mundo de la farmacología es capaz de proporcionar un sello completamente perfecto, sin embargo, el vendaje oclusivo se acerca a esta meta.

Su adquisición en algunos caso es de fácil acceso, podemos adquirir uno en una farmacia o mercado, aunque su uso por lo general se destina a hospitales y clínicas, además de poder ser aplicados por un profesional. Los vendajes oclusivos son un plástico transparente que está compuesto por un material hidrocoloide sobre una de sus caras. El hidrocoloide se coloca sobre la piel donde se encuentra la herida y se adhiere al tejido, de esta forma absorbe los líquidos para crear un gel hidrocoloide oclusivo no adherente.



Son varias las razones por la cual usar un vendaje oclusivo en vez de un apósito más común que permita a la herida respirar, una de ellas es para asegurar que un ungüento penetre en el fondo de la lesión, gracias a los sellos que posee el vendaje oclusivo la pomada no se va a evaporar forzando que se quede en la herida. Otra de las razones que se tiene para usar un vendaje oclusivo es cuando se detecta sospechosos o potenciales alérgenos, de esta forma poder sellar la herida en contra de ellos.

Cosas a tener en cuenta de los vendajes oclusivos

• Al igual que otros apósitos, los vendajes oclusivos deben ser verificados periódicamente y cambiados para reducir el riesgo de infección y otras complicaciones.
• Los vendajes oclusivos se asegura con cinta médica.
• El vendaje oclusivo se puede combinar con una gasa para mantener una herida húmeda.
• Gasa empapada en antibióticos como agentes ayuda a mantener una herida húmeda a la vez que lo protege de la infección adicional.

¿Cuándo cambiar un vendaje?

Un vendaje se debe cambiar cuando este se moje o se ensucie, o por supuesto, cuando su médico lo indique. Para hacerlo en necesario lavarse las manos antes y después de cambiar el vendaje. Recuerda que el vendaje absorbe los líquidos que sale de la herida, es por eso la importancia de la higiene en las manos. Usted debe cambiar sus vendajes en la mañana y por la noche, y también después de cada baño o ducha. Pregúntele a su médico acerca de cambiar los vendajes con más frecuencia si la herida tiene una gran cantidad de drenaje o sangrado.

¿Cómo cambiar un vendaje?

1. Lave sus manos con jabón y enjuague con abundante agua caliente hasta limpiarlas en su totalidad. Seque con una toalla y haga uso de guantes de goma.
2. Comience a despegar lentamente los extremos del vendaje, cualquier exceso de líquido que salga de la herida debe ser limpiado con toallitas antibacteriales para evitar una infección.
3. Coloque un vendaje que este limpio, selle con cuidado los bordes con un cinta especial, esto para dar más seguridad a la hora de sujetar el vendaje.
4. Luego, para finalizar, lave sus manos de la misma forma como lo hizo al principio, eche los guantes en una bolsa plástica y tírela a la basura.

¿Cuándo usar un vendaje?

Las personas día a día estamos expuestas a sufrir cualquier tipo de lesión, torcedura, fractura, esguince, etc. Para tratar esto es que hacemos uso de un vendaje, por eso muchas veces necesitamos saber cuándo usar uno.

Un vendaje de debe usar cuando sufrimos una torcedura en un tobillo o incluso en la muñeca, también hay veces en las cuales no necesitamos usar un vendaje, por ejemplo para tratar heridas, para estas se debe evaluar el tamaño de la misma, no todas las llagas que se crean en la piel necesitan un vendaje, puede que tal vez esta sea bastante pequeña y sólo se necesite desinfectara y usar otro método para sanarla. En cambio, si la herida es más considerable y comienza con un sangrado, usar una venda será una forma eficaz de controlarla.

Como hemos dicho, los vendajes son unos de los materiales más importantes en cualquier botiquín de primeros auxilios, en nuestros hogares no debe faltar uno debido ya que la mayoría de las lesiones tienden a necesitar de un vendaje, es para estar preparado ante cualquier situación.



También puedes usar vendajes como prevención, por ejemplo, cuando realizas cualquier actividad deportiva donde sometes a las articulaciones a esfuerzos muy grandes. También debes usar un vendaje cuando se quiera inmovilizar una zona para que el proceso de curación se lleve a cabo de la forma menos traumática, se puede usar un vendaje para algunos pacientes con problemas neurológicos para evitar posiciones viciosas y por supuesto, se utilizan vendajes para sujetar apósitos.

En resumidas, un vendaje se debe usar en el tratamiento de heridas, hemorragias, contusiones, esguinces, luxaciones y fracturas.

¿Cuándo quitar un vendaje?

El acto de retirar un vendaje se ha convertido para muchos una experiencia más traumática que la misma lesión. Tal vez el momento para quitar un vendaje no sea el más esperado para la persona, pero qué más, hay que saberlo.

No será más que un médico quien diga de forma acertada cuándo quitar un vendaje, y ya, eso es todo. Tal vez pienses que es poca información pero sin duda, es la mejor. No se recomienda que tú, por tu propia cuenta, decidas algo tan delicado sin conocimientos previos, es por eso que se deja en manos de un profesional que sabrá el momento oportuno para hacerlo, lo que te podemos dar aquí sería una serie de consejos para que al quitarlo, no sufras tanto como otras personas.

Consejos para quitar un vendaje

• El momento más oportuno para quitarse un vendaje es a la hora del baño, con agua para humedecer, cualquier venda se despega mejor.
• Retire el vendaje en dirección de los vellos.
• Es mejor retirar la piel del vendaje que el vendaje de la piel, es decir, será mejor empujar la piel hacia abajo, que insistir en tirar la venda hacia arriba.
• Si tu piel es delicada, puedes aplicar algún producto que te ayude a despegar el vendaje.

¿Por qué es importante un vendaje?

Por medio de los vendajes podemos minimizar el riego de infección de una herida. Cuando ocurre esto, mientras la herida está abierta se recomienda usar un vendaje para impedir el ingreso de microorganismos. La importancia de los vendajes también radica en las inmovilizaciones de una zona, esto brinda una óptima recuperación y sin trastornos posteriores. Los vendajes son importantes de aplicar cuando ocurre una torcedura, quemadura, fractura, herida y mucho más, como bien sabemos, estas son algunas de las lesiones que podríamos sufrir en el momento más inesperado, no será un mejor tratamiento, además de otras cosas, que la aplicación de un vendaje adecuado.

¿Por qué es importante un vendaje en primeros auxilios?

Hombros, codos, muñecas, dedos, tobillos, rodillas, caderas, espaldas son muchas las zonas del cuerpo que pueden llegar a ser afectadas por patologías usualmente traumáticas o deportivas, para estos casos, los vendajes representan una de las primeras fases de tratamiento, la correcta aplicación del mismo, con materiales adecuados pueden marcar la diferencia entre una recuperación con éxito y una no muy bien lograda. Si ocurre lo segundo, estamos expuestos incluso a generar problemas posteriores en la persona.

Ya que los vendajes se utilizan en el tratamiento de muchas lesiones, y que esas lesiones son tan comunes y posibles de padecer, su importancia en estar en cualquier botiquín de primeros auxilios es mayor. Un botiquín de primeros auxilios es algo que tenemos para atender casos los más pronto posible, estos incluso nos sirven para salvar la vida de una persona, o también la propia. Con esto, queremos decir que los vendajes son importante para un botiquín de primeros auxilios ya que su uso es muy demandado, necesitamos contar con uno en el momento preciso, sin contra tiempos. Su importancia es grande y jamás puede falta un vendaje

Los vendajes sirven para muchos propósitos durante la aplicación de primeros auxilios, como por ejemplo, la fijación y mantenimiento de apósitos sobre el área afectada, detener el sangrado de una herida mediante la presión impuesta a ella, limitar o incluso inmovilizar una zona lesionada para evitar daños posteriores, realizar o situar férulas, cabestrillos, entablillados y otras técnicas empleadas para posicionar una extremidad, entre muchas otras tanto en el sitio del accidente como en tratamiento subsecuente.

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Esto ha sido todo de lo que vamos a hablar en este articulo, por supuesto que no el único, hay mucho qué decir con respecto a los vendajes, por eso iremos subiendo una serie de post que seguramente son de interés social, esperamos que esta información contribuya de alguna manera a los lectores, bien sea para una tarea o simplemente por conocimiento personal, cualquier contribución que hayamos generado, nos llenará de mucha alegría y nos permitirá seguir adelante para expandir el conocimiento sobre los primeros auxilios.